Cambiar la Bañera por Plato de Ducha: Una Experiencia Transformadora en Leganés 

En el mundo del deporte de alto rendimiento, cada paso cuenta. Mi nombre es Ana María, tengo 22 años y resido en Leganés. Como apasionada del voleibol, he dedicado gran parte de mi vida a esta disciplina. Sin embargo, el año pasado, sufrí una lesión grave que cambió por completo mi perspectiva. En medio de la adversidad, me encontré con Duchavida, una empresa que transformó mi baño y mi vida al cambiar mi bañera por un plato de ducha. 

Un Accidente Inesperado y sus Consecuencias

Durante uno de mis entrenamientos, ocurrió un infortunado incidente. Mientras saltaba, colisioné violentamente con una compañera de equipo, lo que resultó en una caída impactante. El impacto provocó una lesión en mi sacro y coxis, generando un dolor intenso y profundo. Mi movilidad se vio afectada considerablemente y, durante casi un mes y medio, estuve en reposo absoluto en Leganés.

El Desafío de Recuperación y la Necesidad de Cambio

Durante ese tiempo, realizar actividades cotidianas, como tomar una ducha, se convirtió en un verdadero desafío. Mis padres, quienes amablemente me brindaron su apoyo incondicional, se enfrentaron a la tarea de ayudarme a levantarme y afrontar cada día con dificultad. Sin embargo, darse una ducha se volvió una tarea ardua e impracticable para mí. La bañera se convirtió en un obstáculo insuperable.

Fue entonces cuando nuestro rehabilitador nos sugirió la idea de instalar un plato de ducha en nuestro hogar en Leganés. La mera idea de tener un espacio adaptado a mis necesidades me brindó un rayo de esperanza en medio de mi recuperación. La urgencia era primordial, por lo que nos propusimos encontrar una solución rápidamente.

Duchavida: La Opción Perfecta

Tras investigar y explorar diferentes alternativas, encontramos un anuncio en internet que nos llamó la atención. Decía: "Cambio de bañera por plato de ducha en 24-48 horas". Esta promesa de agilidad y eficiencia nos hizo tomar la decisión de elegir Duchavida. La necesidad de contar con una instalación rápida y de calidad era inmediata para mí.

Contratamos los servicios de Duchavida y así dio comienzo a nuestra gran transformación. A pesar de encontrarme postrada en cama, pude percatarme de la calidad del trabajo realizado por los profesionales de la empresa. Trabajaron de manera diligente y rápida, demostrando un cuidado excepcional por nuestra casa en Leganés. Las medidas de protección, como el uso de plásticos y cartones para salvaguardar las paredes y el suelo, me impresionaron gratamente.

Además de reemplazar la bañera por un plato de ducha, se instalaron barras de sujeción en la pared, tanto dentro como fuera de la ducha, para brindarme mayor seguridad y estabilidad. Los grifos también se adaptaron a mis necesidades, permitiéndome un manejo sencillo. Asimismo, se colocó una mampara espaciosa que facilitaba el acceso, ya que, en mis primeros pasos hacia la recuperación, necesitaba que alguien me acompañara. El plato de ducha en sí era altamente antideslizante, lo cual era esencial para evitar cualquier contratiempo en mi proceso de rehabilitación.

Un Cambio que Trasciende lo Estético

Si bien la estética no era una prioridad en ese momento, decidimos realizar una transformación sencilla pero funcional en nuestro baño. Partimos de un diseño básico, con azulejos blancos y rectangulares, y una antigua bañera. El resultado fue un baño moderno, de colores pastel claros y sin excesivos detalles ornamentales. Lo más destacable fue que, a pesar del cambio de bañera por plato de ducha, la esencia del baño se mantuvo, convirtiéndose en un espacio más funcional y adaptado a mi situación en Leganés.

Hoy, una vez recuperada, puedo afirmar con certeza que el cambio de la bañera por un plato de ducha transformó mi vida de manera milagrosa. El proceso de ducharme se volvió más sencillo y autónomo, facilitando mi recuperación. Ahora, disfruto de un baño moderno y funcional, que no solo me brinda seguridad, sino que también me permite vivir en plenitud. Aunque desde entonces no he experimentado ningún contratiempo adicional, cada día agradezco la decisión de cambiar la bañera por un plato de ducha, ya que me ha permitido disfrutar de una experiencia adecuada, ágil y sin preocupaciones antes de salir a la calle en Leganés o a mis sesiones de entrenamiento.